11.4.07

Tú a Boston y yo a California

Hoy es el día en que tengo que ir a firmar el contrato para mi nuevo trabajo que sólo durará un par de meses. No sé ni cómo se me dará, pero creo que si empiezo, será mejor que nadie recurra a mí los primeros días, hasta que le coja el truquillo a la cosa. Porque tengo que pillarle el punto, no sea que la liemos.

Mi firma está condicionada con el destino que puedan ofrecerme cuando sea yo la que estampe mi rúbrica en papel. Antes deben elegir los que van delante de mí, por orden de puntuación, hasta llegar a mi triste persona (lo de persona es un decir :D), y si me encuentro con que me mandan a tomar viento, tendré que rechazar la oferta ante mi imposibilidad de teletransportación actual, ya que mi cacharrito está averiado.

Además, con tanta fiesta y tantos otros menesteres, me he dejado un poco de lado los apuntes de la opo, que ya la tengo ahí, ya la tengo ahí, ya la tengo ahí... Tanto tiempo dedicado a la oposición para encontrarme que me la juego. Si la suspendo, no entraré en bolsa de trabajo, y tendré que esperar quince años (o más) para esperar a que la vuelvan a convocar. Además, ya ha salido la fecha del segundo exámen de la otro oposición que aprobé, no hace mucho, pero que debería ir ya mirando algo. Pero no sé qué puedo prepararme cuando no tengo ni la más mínima idea de qué se hace en una cosa así. Dejemos que mi imaginación y mi inspiración me invadan para cuando el momento llegue.

Pero creo que soy una mujer de recursos, que cuando una puerta se cierra se abre otra, y que no hay mal que por bien no venga. Como llevo tanto tiempo con los apuntes, creo que a quien madruga dios le ayuda... Y bueno, creo que estando en varias bolsas de trabajo ya, no debería quejarme, pero... a mí me gustaría estar en la lista de los afortunados para la que llevo años mentalizándome en que puedo entrar. Lo demás, ha sido puro azar, simplemente suerte. Y mientras pasa el tiempo hasta que me llamen de alguna, seguiré aceptando trabajos temporales de cualquier índole, porque no sólo de fotocopias vive el hombre...

Cuando regrese, os cuento qué tal, dónde y de qué, irá mi trabajo.

Ps: Acabo de cargarme la tapa del váter, la he roto al sentarme. No sabía que mi culo tenía unas dimensiones destructoras. O puede ser que la tapa estuviera ya tocadita de antes. Da igual. No todos los días se rompe la tapa del váter por culpa de una, y merecía ser recordado para años posteriores.

Ps2: Cuando vuelva, tengo que ir a comprar una tapa nueva. Que no se me olvide.

1 comentario:

Satrústegui dijo...

En muchas ocasiones he pensado que quizás este blog debería llamarse (o al menos subtitularse) "el maravilloso mundo de las oposiciones".

Doña Eufrasia, luche. Salga adelante, consígalo y llenenos de orgullo. Sobretodo llenenos de ilusiones de que el resto, simples mortales, también podemos aspirar a lograr un puesto por oposiciones.

Adelante!